jueves, 29 de noviembre de 2012

Mientras siembren coca, habrán narco estados

Acabo de leer sobre cómo Bolivia también llegó a ser un narco estado aquí. Sé que en Colombia pasó algo similar, y que acá en Perú casi llegamos a lo mismo. Acá en Perú, el terrorismo ha sobrevivido gracias a ella, ya que de ella se hace la droga que se consume en el mundo. Entonces, me pregunto yo hasta dónde puede llegar el egoísmo individual, de buscar preservar una costumbre sin importar las consecuencias de este. Entiendo que haya gente que tenga arraigada la costumbre de sembrar coca, sin fines ilegales como producir cocaína, pero demasiado está en juego si permitimos algo así. ¿En dónde acaban los derechos de uno? Más bien, en dónde uno pone una línea y admite que lo que uno hace no afecta directamente al problema, pero sí tangencialmente. Convencer a alguien de dejar una costumbre y pedirle incluso que lo haga por un efecto indirecto de su comportamiento es el problema que tenemos con todos los problemas de comportamiento en el mundo. ¿Porqué en este caso la gente debería portarse diferente? Tal vez porque el impacto social es mayor y tangible. Hay tanto por mejorar que yo sigo sintiendo que como sociedad aún estamos en pañales, y que claro que diremos que hemos avanzado si nos comparamos en dónde hemos estado, pero yo miro en dónde deberíamos estar y es que siento que no hemos mejorado como personas en mucho tiempo. Hay mucho por hacer. Dejar de cultivar coca legal, será un buen indicio de que andamos mejorando.

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